En un esfuerzo por aliviar las crecientes tensiones en la frontera israelí-libanesa, Israel y Líbano han alcanzado un acuerdo de alto al fuego, el cual entró en vigor este martes, tras días de enfrentamientos armados que dejaron víctimas en ambos lados. El acuerdo fue mediado por la ONU, que ha estado actuando como facilitadora del diálogo entre ambos países.
La tregua llega tras más de un año de un conflicto que creció de forma exponencial en los últimos dos meses, con una devastadora ofensiva de bombardeos israelíes que se extendieron por todo el país, incluido el corazón de Beirut, además de una incursión terrestre.
Y siguió al anuncio hecho la víspera por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien anticipó que “está diseñado para ser un cese permanente de las hostilidades”.
Antes del anuncio de Biden, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, informó de que el gabinete de seguridad había aceptado la propuesta e insistió en que Israel tiene “libertad de acción” si Hizbulá viola el acuerdo y cuenta con garantías de Washington al respecto
El conflicto se había intensificado después de un intercambio de fuego en la zona sur de Líbano, en la que se vieron involucrados fuerzas del Ejército israelí y grupos militantes respaldados por Hezbolá.
El primer ministro libanés, Najib Mikati, confirmó, tras la entrada en vigor de la tregua, que están trabajando para reforzar la presencia del Ejército en el sur de Líbano, zona de la que los miembros de la formación armada deberán replegarse.
Según la cadena de televisión libanesa Al-Mayadeen, el Ejército israelí bombardeó un edificio del municipio de Ghobeiry, unos cinco kilómetros al sur de Beirut, poco antes del alto el fuego
Según las autoridades de ambos países, el alto al fuego fue negociado bajo la supervisión de las Naciones Unidas, y se acordó que las partes se comprometan a una desescalada inmediata de la violencia. A cambio, Israel ha accedido a cesar sus ataques aéreos y de artillería sobre las posiciones en el sur de Líbano, mientras que Hezbolá se ha comprometido a detener los disparos de cohetes hacia territorio israelí.