La jueza Kenya Romero reenvió para el jueves 8 de julio el conocimiento de la medida de coerción contra los implicados en la Operación Medusa, por presuntamente dirigir una red criminal de corrupción y lavado de activos desde la Procuraduría General de la República.
La decisión fue tomada por la jueza a los fines de que algunos abogados tomen conocimiento de expedientes y puedan presentar sus presupuestos de arraigo para demostrar que sus clientes no representan peligro de fuga y a tales fines solicitar que no se les imponga prisión preventiva.
La Procuraduría Especializada en Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) pidió que le sea impuesta prisión preventiva como coerción al grupo encabezad