De unos años para acá, la población dominicana se ha vuelto violenta y muy sensible a las criticas, violencia que se ejerce de manera verbal, psicológica y física. El porte de armas indiscriminadamente agrava esta situación ya que personas que no tienen manejo de sus emociones, al estar armados, la primera reacción es disparar.
Hemos visto como individuos han sido capaces de matar a otros ciudadanos por el simple hecho de un roce vehicular, en vez de ir al dialogo ya que para eso son los seguros de autos.
Es impostergable buscar una solución a la violencia que arropa al país, Republica Dominicana era un modelo de amabilidad, buen trato y cordialidad, por eso nos distinguían los extranjeros que visitaban este país. Luchemos unidos contra este flagelo que nos está destruyendo.
