Buenos Aires (EFE).- La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, fue condenada hoy a 6 años de prisión en un juicio por irregularidades en la concesión de obras viales durante los gobiernos kirchneristas (2003-2015).
Al dictar sentencia en un juicio que se había iniciado en mayo de 2019, el Tribunal Oral Federal 2 también condenó a la expresidenta a la pena de inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
Había rechazado acusaciones
La defensa de la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, habia apelado a la «intromisión» del poder político y al rol de la prensa y puso en duda la «imparcialidad» de los tribunales en su alegato en el juicio que la sienta en el banquillo por presunta corrupción cuando era mandataria (2007-2015).
«Después de casi tres años de audiencia donde se recogieron múltiples, múltiples evidencias, quedó demostrado que lo que se decía en 2016 e incluso antes carecía de verosimilitud y que las pruebas que se recogen» en el juicio «destruyen cualquier tipo de acusación, por supuesto falsa y sin fundamentos», alegó este lunes Carlos Beraldi, uno de los abogados de la vicepresidenta.
«Pese a ello, durante nueve jornadas escuchamos un alegato en donde, olvidándose todo lo que se había sustanciado en este juicio», formuló «las mismas acusaciones que se habían formulado desde 2008 y 2016», señaló Beraldi, respecto del alegato de la Fiscalía.
La Fiscalía culminó su alegato el pasado 22 de agosto con una petición de condena de 12 años de prisión para Cristina Fernández y su inhabilitación para ocupar cargos públicos por los delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta en sus dos períodos como mandataria.
Beraldi indicó que se escucharon «cosas insólitas» que los medios de comunicación reportaron en el sentido de que la prueba de la Fiscalía era «contundente» y se le adjudica un peso de 3 toneladas: «Nunca había escuchado semejante disparate».
Agencias